Aunque sea tremendamente impopular, creo que la democracia no funciona.
Sólo unas pocas personas están capacitadas intelectualmente para ejercer
el voto con cierto criterio y poder así elegir buenos gobernantes. El
problema está en establecer esa arbitraria línea que divide a los que
deberían de los que no deberían votar. Y visto el nivel de ética
estatal, el gobierno establecería un criterio tan injusto que produciría
un sistema aún más tiránico y decadente que la actual democracia.
Pasemos al plan B: educar a la gente para que mejore la elección de los gobernantes.
Pasemos al plan B: educar a la gente para que mejore la elección de los gobernantes.
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