miércoles, 3 de julio de 2013

Seamos derrotistas


Ayer leía con cierta preocupación la siguiente noticia: el retorno de la Ley Castrense de aplicación civil, o también conocida como el Derecho Militar extrapolado a toda la nación en caso de guerra.

Si aún no estás dando gritos de horror mientras lees esto, es que no has entendido una mierda de lo que acabo de decir. Según wikipedia "El Derecho militar es el conjunto de disposiciones que regulan la organización, funciones y mantenimiento de las Fuerzas Armadas."

Lo que propone el Ministerio de Defensa del actual gobierno de Caraplasma, con el Ministro Morenés a.k.a. "fabricante-de-bombas-de-racimo-y-me-querello-contra-el-gobierno-de-ZP-por-acatar-la-Directiva-Europea-de-no-fabricación-de-bombas-de-racimo" es la aplicación del Derecho Militar a la población civil.

Esta es posiblemente una de las noticias más relevantes y preocupantes del año, contando incluso con los papeles de Bárcenas o la imputación de la infanta in-imputable. Y a pesar de su tremendo calado apenas ha tenido relevancia mediática. El nuevo Código Penal Militar ha sido modificado para que "en caso de conflicto armado, cualquier español que difundiera información clasificada o de interés militar que perjudique la defensa de España o sus aliados podrá ser acusado de traición y condenado, por un tribunal militar, a 20 años de cárcel. Y cualquier civil que desobedezca un bando militar podrá ser condenado con hasta seis años de cárcel."


En la democracia del sr. Caraplama (a partir de ahora "sargento Rajoy" o "Alístate: el Tío Rajoy te necesita") si entramos en guerra, esta entrada, este blog y mi vida social en su práctica totalidad podría incurrir en delitos de Traición y Derrotismo, así que por el simple hecho de ser objetor de conciencia, contestatario, revolucionario, pacifista, antimilitarista y comprometido hasta la médula con la libertad de expresión y de información libre, podrían caerme hasta 26 años de cárcel militar, si es que no recibo un tiro en la nuca sin querer o desaparezco misteriosamente en medio del Atlántico Norte.

 
En resumidas cuentas, hemos pasado de un Estado "Democrático" (apreciense la cursiva y comillas) al Estado Militar de Excepción, donde nuestros derechos no valdrán absolutamente nada y estaremos a merced de los mandos militares en casos de guerra. Es absolutamente aterrador, pues estas medidas legislativas no son arbitrarias y debe significar que temen algo gordo  y que se están preparando para cuando suceda lo "inevitable".

Así que antes de que estalle la 3ª GM (o la 4ª según mi propia tesis), cometeré con alevosía los futuros delitos militares de Derrotismo y Traición a la Nación para avisaros de que, si creíais que vuestra vida no valía una puta mierda hasta ahora, esperad a que salgan los tanques a la calle y os obliguen a trabajar 16 horas/día en una fábrica de bombas de racimo, o que un piquete militar situado por sorpresa al lado de la frutería de tu barrio realice un reclutamiento forzoso para defender a tu patria frente al enemigo, eso sí, por la gracia de dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario