lunes, 14 de diciembre de 2015

Reproducir la estructura de poder

Experimento: vean el vídeo primero

Muchos crecieron asumiendo la sumisión o la resignación porque de algún modo todas las estructuras humanas (familia, escuela, trabajo, sociedad) han adoptado sistemáticamente la misma jerarquía de poder vertical.

La élite del poder sabe que su posición privilegiada siempre ha dependido de un adoctrinamiento masivo para perpetuar el status quo. Dicho adoctrinamiento no es otro que la castración o poda, desde la infancia, de la libertad, la creatividad, la cooperación, la sensibilidad y la expresividad. En el vacío dejado, se inserta la obediencia, la secuenciación, la competitividad, la violencia y el egoismo.

Es así como se crean ciudadanos "ejemplares": sumisos, tremendamente capacitados para adoptar rutinas, competitivos, aislados y dispuestos a morder al prójimo para escalar un poquito en la pirámide alimenticia de esta selva de hormigón.

Una vez adultos, la mayor parte de ellos, creen que la libertad es poder elegir en qué se gastan su sueldo, creen que la creatividad trae problemas, y confunden la caridad con la cooperación. Saben que el mundo está mal, porque no son ciegos, ni tontos, pero viven resignados porque están convencidos que el mundo no va a cambiar ni puede ser cambiado. Les extirparon su capacidad de lucha, su capacidad de rebelarse contra la injusticia. El miedo les atenaza. O directamente no saben por donde empezar. Y lo peor de todo es que no dudarán en reproducir el mismo esquema, ahora padres, hacia sus propios hijos... Sé bueno, obedece, no cuestiones todo. No vaya a ser que te ocurra rebelarte, que te castiguen y que sufras la crueldad del sistema. Mejor vivir con miedo que morir libre.

No los culpo, pero me compadezco de ellos.

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